Hoy amanecí y Liqs ya no estaba.
Las despedidas son lo peor del mundo. Es como que se muera alguien. Aunque sea por un rato. Y más cuando las distancias son tan lejanas.
Hoy se murió Liqs de Guadalajara. O más bien dicho Guadalajara se murió de Liqs.
Y yo también. Pero sólo un rato, en lo que Liqs regresa, o yo me largo de aquí.
Ahora las fiestas, los gallos, las chelas, la música y el buen trip se saborearán diferente.
Aplaudo a los hombres que se largan sin miedo, porque aquí sólo las palomas vuelan. Y sí vuelan, nos cagan encima. Los nuevos aires siempre traen cambios. Y Liqs no fue ni paloma, ni miedoso. Fue como Fénix. Y ahora se reinventa y quizás adopte un acento gracioso.
Ciclos se cierran de nuevo. Imágenes de laughter y amusement se proyectan en mi corteza cerebral. Y el hombre, acostumbrado a sobrevivir, se adapta o perece.
Chicomota 9 sin deseos de perecer. Now we are completely on our own.
No hay comentarios:
Publicar un comentario